La encarnación emocional

Las personas experimentan diferentes emociones al leer en su primera y segunda lengua.

Cuando las personas leen historias, a menudo se ven cautivadas por las experiencias emocionales de los personajes, hasta el punto de empezar a experimentar físicamente esas emociones también. Este fenómeno se denomina embodiment y fue documentado por Francesco Foroni, de la Escuela Internacional de Estudios Avanzados de Italia, en 2009.

La teoría de la personificación es válida en la lengua materna; sin embargo, un estudio realizado por Foroni demostró que se rompe en las lenguas adquiridas.

Su hipótesis es que esto se debe a que, en la adquisición de la primera lengua, las personas suelen aprender el lenguaje emocional mientras experimentan las emociones correspondientes. En cambio, los adultos suelen adquirir segundas lenguas en entornos más esterilizados, como las aulas, donde no tienen la oportunidad de experimentar las emociones mientras aprenden el vocabulario que las describe.

De esta investigación se concluye que aprender un idioma en su contexto crea una conexión emocional más profunda.

Las capacidades cognitivas de nuestro cerebro son impresionantes y el ambiente en el que nos desarrollemos permitirá manifestar el máximo rendimiento de estas.